Alaska y Mario Vaquerizo un amor distinto. Conocida como una de las parejas más estables y reconocidas de España Alaska y Mario se niegan a ser una pareja tradicional.
Hace poco acaban de celebrar su aniversario de boda. En medio de un año complicado por la pandemia de covid que afecta al mundo, están cargados de proyectos que procuran conseguir y seguir siendo una pareja diferente.
Han tenido como pareja dos bodas pero la que más les gusta celebrar es la primera. El 29 de noviembre de 1999 se casaron lejos de lo tradicional en Las Vegas. Alaska vestida de Dolly Parton y Mario vestido de Elvis Presley. Unieron sus vidas luego que él trabajara para ella y se enamoraran sin remedio.
Su segunda boda fue más tradicional y pegado a lo normal, en el año 2011 se dieron su segundo “si quiero” en Madrid. En una boda civil que estuvo llena de cámaras y que realmente llevaron a cabo para dejar todo listo y bien arreglado según la ley. Ahora celebran 21 años de amor, romance y unión siendo siempre una pareja muy diferente.
Para ambos la fecha que más los ilusiona es la primera unión.
Un matrimonio diferente
Mario siempre complace a su mujer y procura llenarle de detalles y romance. Asegura que luego de haber participado en MasterChef Celebrity siempre le prepara lentejas para celebrar su aniversario. En este año parece que las cosas han sido diferentes.
Han celebrado sin lentejas y con pandemia, ha sido un año muy complejo aseguran ambos. Para este aniversario han decidido hacer las cosas de otro modo, como el año ha sido tan atípico decidieron que en la mañana antes de salir se entregaran los regalos.
Mario le ha comprado a Alaska un hermoso anillo de la Colección Panthére de Cartier que está valorado entre los 20.000 y los 30.000 euros.
Por su parte Alaska le ha entregado a su marido dos camisas, un perfecto de cuero y dos maravillosos viajes a Londres para la próxima primavera para poder ir a los conciertos de dos de sus grupos favoritos los Blondie y Los Pet Shop Boys.
Luego caminaron por el Rastro y de ahí se fueron a dormir a su casa de Boadilla del Monte a coger aceitunas.
Ellos están considerados como uno de los matrimonios más sólidos, estables, peculiares y populares de la televisión Española. Así mismo disfrutan su vida tal cual la llevan y no tienen en sus planes convertirse en un matrimonio corriente.
Con una brecha de 11 años entre ellos, la diferencia de edad nunca ha representado un problema. Cuando se casaron Alaska tenía 36 y Mario 25 y aun así, más de dos décadas después siguen amándose como el primer día.
Trabajar la relación es el secreto
Mario asegura que el único secreto para seguir juntos después de tanto tiempo y seguir amándose como el primer día es trabajar la relación constantemente. Es imprescindible que se respeten mutuamente aunque eso implique un gran esfuerzo.
A pesar de verse diferente al resto de las parejas, siguen siendo igual a su modo, les gusta compartir en familia y reunirse aunque por decisión mutua y sobretodo de la mano de Alaska ambos decidieron no tener hijos.
Alaska asegura que tener hijos, cuidarlos, educarlos y tener esa responsabilidad no es lo de ellos. Les gusta malcriar a los hijos de los demás en especial los de los amigos pero por mutuo acuerdo prefirieron no tener descendencia.
Aunque parecen ser muy sólidos igual han pasado por sus altos y bajos como matrimonio. Han vivido varias crisis, en una de ellas Alaska pasó por una depresión vital y Mario se plantea si realmente estuvo a la altura de lo que ella necesitaba.
También vivieron momentos muy complicados cuando uno de los mejores amigos de Mario murió. Alaska cuenta que el peor momento de Mario fue cuando murió su hermano. Si él no estaba bien no podía estar bien con ella. Discutían mucho pero al final del día todo se solventaba.
A Mario el enfado le dura 5 minutos y es uno de los puntos fuertes a mí me dura 5 días. Aun así ambos consiguen la fórmula para que todo pase y seguir adelante.
Siguen divirtiéndose como adolescentes que comienzan un noviazgo, cada uno a su manera Mario suele ser más divertido, auténtico y muy espontáneo, por su parte Alaska mucho más tímida, comedida y muy dulce forman una pareja peculiar pero muy querida en la TV española.
Los polos opuestos se atraen
Tienen muchas cosas en común pero personalidades muy distintas. Alaska asegura que Mario es igual a su mamá de extrovertido. A ella le cuesta abrirse y contar sus cosas aunque ha ido aprendiendo con Mario a ser más expresiva.
A pesar de que se ven muy diferentes, suelen ser bastantes tradicionales, por ejemplo son Monógamos totalmente declarados y jamás está en ellos abrir la relación de ninguna manera. Les gusta exponerse, contar y hablar en la tv pero no demasiado.
Para ambos el tema de la pandemia ha sido difícil de llevar, quieren que todo regrese a la normalidad y que todos puedan trabajar y estar bien. Por el momento hay que apostar a la precaución y a cuidarse. Aseguraron que pondrían la navidad, los belenes y que procurarían visitar a sus familiares mientras la ley lo permitiera para por lo menos vivir un poco la ilusión de estas fiestas.
Ambos concuerdan en que la pandemia no nos puede robar la ilusión de la vida, ya nos ha robado mucho para dejarle que nos quité mucho más. Asegura que hay que celebrar como se pueda si son seis personas las permitidas entonces con seis pero no dejar de disfrutar de la compañía.
Dicen que las cosas lindas de la vida hay que seguir celebrándolas como su aniversario de bodas. Son sin duda una de las parejas más queridas y buena gente de España que sigan celebrando muchos años más de unión y felicidad.
